
En una entrevista de Buenafuente a Carles Francino, este último soltó una frase lapidaria: "el hijo de puta es el que nunca te falla, siempre está ahí".
Cuánta razón, Carles, tú sí que sabes de la vida.
Les llamemos como les llamemos: hijos de puta, moscas cojoneras, tocahuevos, ellos siempre responden a los mismos estímulos y actúan como vampiros que necesitan libar nuestra paciencia para sobrevivir. Si su estrategia no les funciona, se desvanecen.
Os recomiendo el cascahuevos, no suele fallar :-)).
Salud y paciencia.
7 comentarios:
Para mi el hijo/a de puta es aquella persona que se encarga de que te acuerdes de el/ella cuando ya habías conseguido olvidarte de su existencia.
Y si es hijA de puta, ¿de que me vale el cascanueces? me lo explique por favor.
Besos
jajajaj, el cascanueces no sé pero el cascahuevos, se me ocurre, puede tener gran utilidad :-). Recuerdas aquel viejo chiste del que va al dentista y le coje de ahí mismo diciéndole "verdad que no nos haremos daño, doctor?" :-)).
Besos.
Creo que al bueno de Carlos le hace falta darse una vuelta por catálogo de instrumentos de la Santa Inquisición...El cascahuevos calentado a fuego lento, era de una utilidad extrema.
Un fuerte abrazo.
Queridos Arturo y Cristina,
quise decir cascahuevos y no cascanueces.
Mi pregunta, veo que mal explicada, es que el cascahuevos es práctico para un hijO de puta, al igual que el chiste del dentista. Pero para lAs hijAs de puta.... ¿que utilidad tiene?
Saludos
jajajajaja, tienes razón, Carlos. Tendré que pensar en algún que otro objeto que sirva para ellas :-).
Ya me estás dando faena.....:-).
La mejor arma contra las hijas de puta es la indiferencia.
Un beso Cristina.
Tienes razón, Jesús Angel, pero eso no siempre hace que descarguemos nuestras iras :-).
Un beso.
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