jueves, 16 de julio de 2009


Cae la tarde


El atardecer se va apoderando del día en mitad de un calor sofocante. No quedan ganas para demasiadas cosas salvo el buscar una imagen que haga saltar la espoleta y el texto adecuado.

Es un dejarme llevar, una sensación placentera que provoca constantes sonrisas a medida que veo y escribo. Sabéis? ésto engancha, me gusta mostrarme a través de estas pequeñas rendijas, día tras día. Es como un juego que me hace crecer y me deja soñar.

Mientras cae la tarde, otra más, dejo a las imágenes elegidas pasearse por mi imaginación tejiendo historias y curtiendo recuerdos.

Junto a mi, Pipo, tumbado indolente buscando el fresco del suelo mientras el ventilador ronronea sin cesar. A través de la ventana abierta del patio, se oye el trinar de las golondrinas de regreso a sus nidos y un trueno lejano, muy lejano que parece perdido en el escenario.

Es un momento perfecto.

Cae la tarde.

6 comentarios:

Spankys dijo...

HI!!

Hola me gusta tu forma de ver las cosas es Genial !!
[ te sigo ]

Carlos Palacios dijo...

A riesgo de que me tachen de lo que no soy las mentes malpensantes, a tu tarde, para ser perfecta, le falta un frío Gin Tonic en copa grande con mucho hielo y un buen gajo de lima mientras suena el bolero de Ravel o el adagio allegro de la Patetica de Tchaikovski. Ains, me acabo de transportar en sueño a un atardecer maravilloso en ... ¿Tu mirador o el mío ;-)?

Besos

Cristina Catarecha dijo...

Spankys, gracias por la visita y el comentario. Un placer.

Carlos, jajajajaj, pues no ha caído el gin tonic aunque sí la tónica, fresquita y con limón. Le ha seguido una rubia muy fría que he tenido que tomarme después de entrar en la Isla de Dummy y leer el soneto.
Es lo que pasa por pasearse tanto por los blogs amigos :-)).
En cuánto a la música...Carlos, me sabe tan bueno el silencio que, con esos trinos, estaba más que perfecto el momento.
Besos.

Pepe Ventureira dijo...

Es una preciosa lección de composición Cristina...la calma total...la calma total de los sentidos, orquestados en esa sensación placentera de la que hablas...el texto es uno solo con la foto...un abrazo

M. Emilia Pavón dijo...

Estoy contigo Cristina en TODO. En el enganche, en el mostrarme poco poco, en el crecer y en el soñar, por no hablar de la birrita y el silencio. Por desgracia yo no tengo ahora conmigo a mi Kika..., pero ¡me escribe unas cartas!

Cristina Catarecha dijo...

Gracias Pepe. Me gusta verte por aquí y notar de nuevo tu actividad.
Un abrazo.

Emi, me alegra coincidir contigo. Un beso!